Este 1 de septiembre, el Director Ejecutivo del INIAP, Dr. Juan Manuel Domínguez, participó en el Simposio Internacional de Innovación Sostenible, llevado a cabo en el Hotel Sheraton de la ciudad de Guayaquil.

A través de la conferencia “Tendencias y Factibilidad de Implementación de Proyectos de Bioenergía en el Ecuador”, el Director Ejecutivo dio a conocer las tendencias de uso de energía a nivel mundial, los procesos de producción de biodiesel y los trabajos que desarrolla el Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias (INIAP) en relación al tema.

Durante su intervención se dieron a conocer los procesos de producción de biocombustible de primera generación (a base de maíz, caña de azúcar, soja, etc), de segunda generación (a base de materia prima que no sea destinada a la alimentación) y de tercera generación (a parir de algas o micro algas).

Uno de los sectores estratégicos establecidos por el Gobierno Nacional como política de estado es el biocombustible, de ahí la importancia de su desarrollo, mismo que se basa en factores energéticos para generar biocombustible que sustituya los combustibles nocivos tradicionales; factores ambientales para reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y desarrollar combustibles biodegradables, ecológicos y renovables; y factores socio económicos para aprovechar áreas marginales improductivas y diversificar la producción.

El INIAP, en una apuesta de satisfacer los objetivos nacionales, ha desarrollado investigaciones en rubros que produzcan aceite, siendo uno de ellos el piñón, que es altamente productivo para la contribución de biodiesel, el cual se desarrolla en tierras marginales y no es comestible, por tanto se lo considera como materia prima para biocombustible de segunda generación.

INIAP cuenta con un banco de germoplasma de 162 accesiones recolectadas a nivel nacional e internacional y un jardín clonal con 128 materiales debidamente evaluados y caracterizados.

Se han seleccionado mediante procesos de investigación cinco líneas promisorias, las cuales tienen características de alta productividad, elevados contenidos de aceite, entre otras, y están siendo probadas a nivel de la Estación Experimental Portoviejo y fincas de productores para su posterior liberación.

A nivel de laboratorio se realizan análisis bromatológicos a las semillas de las líneas seleccionadas y se evalúan las características del aceite obtenido y sus usos posteriores, así como los subproductos resultantes de la extracción, los cuales tienen un elevado contenido nutricional.

Adicionalmente, se evalúan distintos sistemas producción con cultivos alimenticios asociados al piñón con el fin de contribuir a la economía y alimentación de los agricultores de zonas marginales de las diferentes zonas de Manabí.

 

 

 

También se desarrollan trabajos con higuerilla y se realiza la colecta de materiales vegetativos para identificar los materiales que tengan una alta productividad.

 

El Instituto Nacional de Eficiencia Energética y Energías Renovables (INER) en colaboración con el INIAP, desarrollaron como proyecto el establecimiento de una planta prototipo ubicada en la Estación Experimental Santo Domingo, que transforma residuos agrícolas y basura doméstica en combustibles líquidos, lo cual permite lograr un alto impacto tecnológico, económico y ambiental, al ser una solución para la gestión de residuos y modelo de investigación para nuevas alternativas energéticas del país.

 

Adicionalmente, el Ministerio de Electricidad y Energía Renovable desarrolló un importante proyecto junto al Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), la GIZ y el INIAP, denominado “Proyecto Piñón para Galápagos”, el cual está orientado a la generación de electricidad para las islas Galápagos con aceite de piñón.

 

El impacto ambiental de este proyecto radica en la reducción de 50 toneladas de dióxido de carbono en el ambiente, mientras que el impacto socio económico se centra en el establecimiento de 80 centros de acopio en 18 cantones de la provincia de Manabí y 2854 personas (productores, recolectores) que se enlazan en este programa.

 

A través de la generación de estos proyectos y el desarrollo de diversas tecnologías innovadoras, el INIAP beneficia a productores y además genera un alto impacto ambiental, generando soluciones amigables con el medio ambiente.

 

 


 

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